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Historia de una maestra

De vuelta

Hoy ha sido el primer día de trabajo después del puente. Ha sido solo un día más, pero la verdad es que se agradece.
Este fin de semana estuve en Valencia, y he venido nueva; super relajada y con buenos ánimos. Ánimos que intento mantener a lo largo de la jornada laboral. Hoy lo he conseguido pero mordiéndome mucho la lengua.
Hay veces que ni me entiendo. Estoy trabajando en lo que me gusta y me pagan por ello, debería tomarme las cosas con más filosofía pero no puedo, supongo que lo iré aprendiendo con el paso de los años.
Yo no me puedo quejar pero cuando hay gente en mi trabajo con mejor situación que yo y los oigo quejarse, me remuevo entera.
Aún así estoy aprendiendo. Hace años, me hubiese callado cosas, las hubiese cacareado y llorado por los rincones y me hubiese jodido, pero con los años estoy aprendiendo a decir las cosas de una forma asertiva.
En fin...tengo tantas cosas que hacer, que no me apetece hacer ninguna fuera de mi horario de trabajo, y así lo he decidido.
Necesito engancharme a algún libro para las noches e intentaré ser constante con el blog, pienso que escribir mi día me ayudará.

1 comentario

Profe -

Ánimo con el nuevo blog, Yerma. El último libro de Pérez Reverte es espléndido y me tiene enganchadísimo (Cabo Trafalgar). En fin, parece que seré el primer comentario que recibas. Suerte.