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Historia de una maestra

EL DÍA DE HOY

No sabría como valorarlo. Conforme el aburrimiento de mis largas tardes me va invadiendo voy reflexionando todo lo que he hecho.
Hay una niña en la clase q es un sol, pero cuando quiere. Tiene un gran corazón, pero los gritos, el querer mandar, las mentiras y las malas formas, la pierden.
Cada día que pasa, la cosa va a peor, me planteo si tendré yo la culpa.
Todos los días me propongo no gritar, porque si grito yo el modelo que los niños tienen es el de los gritos y ellos actuarán tal y como lo hace su maestra. Pero hay momentos en los que no puedo. Esta tarde parecía una loca, he pegado un grito que hasta se me ha ido la voz por un momento. Sé que son niños de 7 años, pero cuando yo tenía su edad, a la mínima estaba más recta que un palo.
No sé que es lo que falla.

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